HERMANOS OS DEJO UNA PARTE DE UN ESTUDIO QUE LEI ,Y ME ACLARO ALGUNAS DUDAS , LO COMPARTO CON VOSOTROS , DIOS OS BENDIGA.
Definición
Diezmo: el pueblo de Israel tenía que destinar al culto y al mantenimiento de sacerdotes y levitas la décima parte de ciertos frutos y animales (Dt 14,22; Lev 27,32). Era un verdadero impuesto religioso que se tenía que dar una vez al año (Dt 14:22). Los fariseos llevaron esta práctica del diezmo religioso hasta la más ridícula exageración, dando la décima parte de las cosas más diminutas y de insignificante valor, tales como la menta, el eneldo y el comino, pero con olvido de la humildad, la justicia, la misericordia, la fe y el amor, lo cual es una grave equivocación (Mt 23,23; Lc 11,42; 18,12).
El diezmo no es una ley destinada a la Iglesia, sino al pueblo de Israel, porque pertenece a la Ley y la Iglesia está bajo la Gracia.
“Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la Ley, sino bajo la gracia.” Rom 6:14 (cfr. Rom 3:19; 2 Co 3:2-11; Gal 3:19; Ef 2:11-15; Hch 7:11-12)
El cristiano no debe estar al servicio del mal (el pecado), sino al servicio del bien, “pues no estáis bajo la Ley, sino bajo la gracia“. Vemos muy claro como se contrapone, como en otros pasajes, la Ley y la gracia. Pero con una aplicación terrible: lo de la Ley es el mal, el pecado; lo de la gracia es el bien.
Levítico
Capítulo 27
27:30 Y el diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová.
27:31 Y si alguno quisiere rescatar algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su precio por ello.
27:32 Y todo diezmo de vacas o de ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, el diezmo será consagrado a Jehová.
27:33 No mirará si es bueno o malo, ni lo cambiará; y si lo cambiare, tanto él como el que se dio en cambio serán cosas sagradas; no podrán ser rescatados.
27:34 Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel, en el monte de Sinaí.
Repetimos: los diezmos bíblicos fueron establecidos para el pueblo de Israel; no para la Iglesia de Jesucristo.
En resumen hasta aquí:
1- El diezmo fue mandado por Dios entregarlo en productos a los sacerdotes levitas, nunca en dinero, porque estos no podían poseer propiedades y para que no hubiera corrupción.
2- El diezmo “era” de la Ley (Mt23:23), “según la ley” (Heb 7:5).
3- En la Gracia debemos ofrendar todos los domingos, libremente, como cada uno propuso en su corazón, sin que tu mano izquierda sepa lo que ha dado tu derecha.
El verdadero cristianismo se basa en lo que Dios ha dicho, jamás en lo que no ha dicho. Hoy muchos dicen: “Muéstrenme un versículo de la Biblia que prohíba cobrar el diezmo” pero sería lo mismo que un drogadicto se justificara diciendo que no existe en la Biblia un versículo que prohíba la marihuana.
Aprendamos a dar libremente y por amor, sin esperar nada a cambio; hagámoslo sin que la mano izquierda sepa lo que ha dado la derecha. No debes de esperar nada a cambio, porque no se puede “comprar” el favor de Dios. A Dios no lo podemos manipular, menos con algo como el dinero. Posiblemente llegue a dar lo mismo que el diezmo o más, pero la gran diferencia está en que no será una carga impuesta y ahí sí vendrán recompensas por parte de Dios. No te engañes pensando que el diezmo que hoy das es tu ofrenda al Señor, porque estarías participando de un mandado impuesto por hombres; acuérdate que lo que dispuso el Señor para la Iglesia fue la ofrenda y no el diezmo que era de la Ley.
No sea cómplice de algo que no ha mandado el Señor, porque usted deberá dar cuenta un día de cómo ha gastado lo que el Señor le ha confiado.
2 Pedro:
2:1 Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.
2:2 Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado,
2:3 y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme.
Los judíos en la actualidad no diezman
Los Rabinos Judíos, quienes en teoría deben de conocer y saber aplicar mejor Ley Mosaica, no cobran diezmos porque ellos saben que únicamente los Levitas pueden cobrar el diezmo. A causa de la destrucción de los archivos genealógicos en la destrucción del Templo en el año 70 d.C., ellos no pueden identificar a los verdaderos Levitas. Usan un sistema diferente para sustentarse económicamente que trata de tantos dólares por cada asiento en sus sinagogas y así poderle dar mantenimiento y sostenerse económicamente. Entonces, ¿podría algún líder probar que es descendiente directo de Arón para tener el derecho de pedir el diezmo (aunque el que piden ahora no es en especies sino monetario)?
De hecho presento a continuación comentarios de judíos sobre el diezmo:
«El mandamiento del diezmo no es obligatorio actualmente, pues no contamos con el Templo de Ierushalaim/Jerusalén, y el diezmo es uno de los preceptos que para cumplirse como el Señor lo mandó es imprescindible su existencia y funcionamiento.»
«El apartar el diezmo (diez por ciento de los ingresos brutos anuales), y entregarlo como caridad, es un mandamiento que el Señor ha dictado en exclusividad para los miembros de la nación judía, en tiempos en que el Templo estaba en funcionamiento.»